Por: Anibal Villa Alvarez| Director de la Facultad de Diseño de la Universidad Mondragón México
La actual crisis del COVID-19 ha puesto de manifiesto la relevancia de los programas online para dar respuestas a situaciones catastróficas, sin embargo, no debería ser el único detonante de una estrategia institucional para una migración o ampliación de su oferta educativa.
El desarrollo de nuevas modalidades educativas impulsadas por el avance tecnológico –como el aprendizaje híbrido (blended learning), los cursos abiertos masivos en línea (MOOC) y los recursos educativos abiertos (OER) entre otros– han dejado en claro la necesidad de actualizar las dinámicas de la formación en el siglo XXI.
Esta transición requiere de modificaciones en las dinámicas y cultura de la institución:
- Uso de herramientas para la innovación en productos, servicios y procesos (e.g. Design Thinnking. Agile, etc.)
- Cambiar de una pedagogía centrada en actividades hacia una pedagogía centrada en el estudiante, donde el acompañamiento, la motivación, la participación y el uso de nuevas herramientas para la evaluación auténtica son fundamentales.
- Programas para la captación y retención de los estudiantes online.
- Desarrollo de docentes con las competencias necesarias para desempeñarse con éxito en tres modalidades: presencial, blended y online
- Colaboración con expertos de la industria (SMEs, subject matter experts) para el desarrollo de los contenidos
- Creación de un área interna de desarrollo que colabore con los SMEs y los docentes. Otra alternativa es considerar la colaboración con un OPM (Online Program Manager) que lleve algunas funciones del proceso.
- Implementación de un área de aseguramiento de calidad de los programas.
- En términos funcionales se deben considerar los siguientes componentes:
Diseño instruccional. En un contexto de aprendizaje a distancia las actividades deben diseñarse poniendo al estudiante en el centro del proceso. Aquí se consideran los resultados de aprendizaje, las secuencias de actividades, formatos y materiales a desarrollar.
Selección y creación de materiales. De acuerdo con el tipo de curso, nivel y estructura se seleccionan materiales existentes que pueden utilizarse por su tipo de licencia (como creative commons) o adquirirse por un costo accesible. En otros casos, dependiendo del nivel de complejidad y personalización será necesario desarrollar nuevos contenidos (objetos de aprendizaje) que puedan usarse en distintos sistemas de gestión. Para ello se emplean herramientas de autoría que cumplan con estándares como SCORM, IMS o XAPI. Pueden ser de código abierto o propietarias (como Adobe Captivate), algunas se integran directamente en el LMS como por ejemplo el contenido interactivo generado por H5P.
Sistema de gestión de aprendizaje o LMS (Learning Management System). Es la plataforma donde se distribuyen los contenidos y se realizan las actividades. Existen múltiples alternativas, la elección depende de la cantidad de programas educativos a manejar, la matrícula esperada, así como el tipo de infraestructura y servicios de TI disponibles. Las opciones van desde plugins para WordPress, software de código abierto como Moodle y alternativas de software as a service (SaaS) como Blackboard, Canvas o Schoology.
Las funciones de un LMS son:
- Administración de los contenidos: creación, almacenamiento y acceso
- Planeación de las lecciones, trayectorias personalizadas de aprendizaje y evaluación
- Información y seguimiento del progreso de los estudiantes
- Herramientas y servicios: foros, blogs, mensajes y grupos de discusión
Infraestructura y soporte. Servicios relacionados con el estudiante: matrícula, documentación, pagos, acceso a la plataforma y biblioteca virtual. Incluye también el sistema para el manejo de la información de los estudiantes: asignación de cursos, docentes y grupos, avisos, recordatorios, etc.
Como se ha visto, no basta tener una plataforma y una selección de contenidos. Para llevar a caso esta transición de forma exitosa es necesario un compromiso de todas las áreas involucradas, así como la asignación de recursos y el liderazgo de la dirección institucional.
En Vinculación Empresarial de la Universidad Mondragón México tenemos experiencia como OPM (online program manager) en el desarrollo de proyectos de educación virtual y podemos ofrecerle una amplia gama de servicios para migrar los programas de su institución o crear un campus virtual desde cero.